recortándose en el gris del cielo,
donde el humo de los mortales
se vuelve puro y anaranjado,
donde una mancha amarilla en la pared
es el único sol de los sobrevivientes...
tras las rejas, el único lugar posible.
Ahí donde resurge el canto del fénix
y las almas de la guerra encuentran refugio,
y las sirenas pierden su tinte mitológico.
El verde es un movimiento en retirada,
no lo distinguen sus ojos
ocultos
tras una corteza gris de humo y muerte.
Ni lo distinguen las manos lastimadas
detrás de la ceniza, la vida en soledad
se apaga.
junto a gloria
junto a gloria
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